13 de febrero de 2024 - 11:25 La masa madre es un fermento natural compuesto por harina y agua, que se utiliza como agente leudante en la elaboración de pan, pizzas y otros productos horneados. Su proceso de elaboración es sencillo, pero requiere paciencia y cuidado, y en este artículo aprenderás cómo hacer la tuya.
Día 2: Alimentar la mezcla con 50g de harina de fuerza, 50ml de agua y una pizca de azúcar. Mezclar, cubrir suelto y dejar reposar.
Día 3: Repetir la alimentación con 50g de harina de fuerza y 50ml de agua. Mezclar, cubrir suelto y dejar reposar.
Día 4 en adelante: Continuar alimentando la masa madre con harina y agua a diario, descartando parte de la mezcla si es necesario para mantener un volumen razonable. Una vez que la masa madre esté lista, se puede utilizar para hacer pan u otros panificados horneados. Para conservarla, se debe mantener en la nevera y alimentarla semanalmente para mantenerla activa.
La masa madre es única, ya que la combinación de levaduras de su entorno no se repite en otras, lo que le confiere un sabor y características particulares a los productos horneados.
Aunque requiere cuidado y atención, una vez establecida, la masa madre puede durar indefinidamente si se mantiene adecuadamente. El proceso de elaboración de la masa madre puede variar ligeramente según la fuente, pero en general, estos son los pasos fundamentales para crear este fermento natural.