Yamandú Orsi: "Hay que ser duros con el delito, pero muy duros con las causas del delito"

También se refirió a la acusación que realizó el candidato Andrés Ojeda, sobre una campaña sucia en su contra, y de la que responsabilizó directamente a “la mesa chica” de Orsi.

El frenteamplista sostuvo que “consultó” con su entorno, pero que “nunca entendió de qué estaba hablando Ojeda”: “Planteó noticias falsas y no vimos nada”.

En ese sentido, apuntó que “las campañas sucias son complejas y en redes pueden aparecer cosas que no son las más adecuadas”, pero agregó que “nunca entendió a qué se refería”.

“Primero vino una acusación sobre mí, después la denuncia iba a ser contra un asesor, después la denuncia iba a ser genérica… veremos cómo sigue”, dijo Orsi. “Me hago responsable de la campaña y no hemos tenido ninguna acción de ese estilo. Ojalá se aclare”, puntualizó, y añadió que hay diálogo con candidatos y autoridades de otros partidos, una suerte de “teléfono rojo”, pero que no tuvo comunicación con el candidato colorado.

Principales propuestas y seguridad

Orsi fue preguntado sobre las tres primeras medidas que tomaría en caso de acceder a la Presidencia, y recordó que, cuando un nuevo gobierno asume, rige el Presupuesto anterior, por lo que no es sencillo hablar de medidas inmediatas sin conocer “qué hay en la caja” del Estado.

No obstante, destacó que se pueden activar algunas medidas, en el caso de contar con los fondos, como un aumento del 50% de las transferencias a la Tarjeta Uruguay Social (TUS).

Lo que sí puede hacerse al día siguiente de ser electo es convocar a los principales líderes políticos para alcanzar acuerdos en “dos o tres cosas fundamentales”, como la reglamentación de un Plan Nacional de Riego, una serie de propuestas para el área metropolitana y enfrentar el problema de la inseguridad, entre otras cosas, con la incorporación de 2.000 funcionarios policiales más en todo el país. “Supongo que los números van a permitir que lo hagamos”, dijo.

Orsi señaló que no tiene el nombre de un eventual ministro del Interior, pero apuntó que sus asesores son conocidos: Gustavo Layera, Ricardo Gil Iribarne, Juan Faroppa, Gustavo Leal y el recién incorporado Roberto Rivero, que trabajó en el gobierno de Jorge Batlle y asesoró a Ernesto Talvi en la campaña pasada.

“Hay que recoger lo mejor de cada experiencia sin olvidar que hay un componente técnico incuestionable que es la Escuela de Policía”, donde se encuentran las personas con mayor conocimiento y experiencia, y a ellos también hay que recurrir, sin descuidar el componente político de la cartera. En ese sentido, remarcó que “hay equipos sólidos” para trabajar en el tema.

También fue consultado sobre las palabras del nacionalista Álvaro Delgado, que sostuvo que la izquierda “romantiza la delincuencia y no la reprime”. Eso, dijo Orsi, “estaba instalado como un mito, pero cuando llegó el momento de actuar, se actuó”.

El candidato agregó que la seguridad es un derecho humano fundamental y “a la izquierda le costó instalarlo”, pero “la represión no puede estar en discusión”. Sin embargo, subrayó que “además de la represión hay que hablar de otros factores” y ser “duros con el delito pero muy duros con las causas”.

Además, aclaró que no considera adecuado “el camino de tocar la Constitución” para permitir los allanamientos nocturnos, y se inclinó por una ley interpretativa del artículo 11 de la Carta Magna, aunque apuntó que “no admite” que sea la bala de plata” contra el narcotráfico.

Economía y seguridad social

Orsi también habló del plebiscito de la seguridad social, al que calificó de “muy negativo”, pese a que la reforma previsional de este Gobierno “generó una reacción en la población entendible”, y opinó que “hay que buscar otro camino”·, como “un diálogo social llegando a acuerdos mínimos con las asociaciones de jubilados, los empresarios, los sindicatos y los partidos políticos”.

En caso de que la reforma sea aprobado, señaló que “hay que designar equipos que tengan la capacidad de imaginar más de un camino para salir de los problemas que genere”, y que se puede buscar alternativas que no impliquen un aumento de impuestos.

“El lunes siguiente hay que sentarse a ver cómo se resuelven los problemas que genera una decisión de este tipo tomada por el soberano”, y “analizar otras estrategias de crecimiento y equilibrio económico”.

Orsi lamentó que no hayan habido consensos en la interna del Frente Amplio sobre el plebiscito, y que “la decisión fue la libertad de acción”, que “no es el mejor escenario.

Desarrollo social, salud y educación

Yamandú Orsi también fue consultado sobre el papel del asistencialismo, fundamentalmente desde el Ministerio de Desarrollo Social, en un eventual gobierno del Frente Amplio.

“Los próximos años hay que analizar los mecanismos y cómo están funcionando las transferencias con ese criterio asistencial”, dijo, aunque aclaró que no es el único punto a tener en cuenta, y explicó que se debe atender a “políticas educativas y sociales para aquellos niños que nacen en hogares vulnerables”.

Entre las propuestas señaló la universalización de la educación a partir de los tres años, fortalecer el Sistema Nacional Integrado de Salud y elaborar políticas de vivienda, “teniendo una visión más territorial del asunto”.

Además, mencionó que “el Estado debería ser más eficiente en esas transferencias” y que no comparte la idea de “ser refundacional”, sino de mejorar lo que ya existe.

En la misma línea, dijo que “se niega a plantear otra reforma educativa”, porque está cansado de “la reencarnación de José Pedro Varela”. Sin embargo, consideró que la transformación educativa de la actual administración da la sensación de “ser improvisada, de hacerse sobre la marcha”, y recordó que “la de Germán Rama era un planteo cerrado y con mucho análisis científico y pedagógico atrás, y esta no”.

Orsi se mostró favorable a llegar a algunos acuerdos fundamentales en la materia, como la extensión del tiempo pedagógico, la universalización de la educación a partir de los tres años, la creación de una Universidad de la Educación, utilizar el Plan Ceibal para trabajar en inteligencia artificial y extender la Universidad y la UTEC a todo el país.

“Lo que no funciona bien lo corregiremos”, señaló, pero sostuvo que debe hacerse con la participación de los docentes. Aclaró que “los sindicatos nunca gobernaron la educación” y que son los gobiernos los que dictan las políticas educativas, pero dijo que “el componente técnico no puede ser excluido y no se debe poner a los docentes en contra”.

El Gobierno actual, los impuestos y el balotaje

El candidato del FA también fue consultado sobre sus expresiones, cuando señaló que, durante este Gobierno, “se perdieron cinco años”, y puntualizó que esta administración continuó la obra dejada por la anterior e hizo “pocas cosas nuevas”.

Reconoció que, pese a la pandemia, se realizó una importante inversión en infraestructura vial “y poca cosa más”.

Orsi descartó que esto sea “un discurso para los indecisos”, pero apuntó que “tiene la obligación de decir lo que está pasando”, y que la economía “no levanta” desde 2015 y, si no lo hace, no podrá resolver los problemas de seguridad, protección social y salud. “No soy de señalar con el dedo, pero hay promesas de campaña que no se cumplieron”, aseveró.

También fue consultado sobre el aumento a determinados impuestos, y señaló que el FA “tiene como consigna que pague más el que tiene más”, pero que eso “no quiere decir que se van a subir impuestos”.

No obstante, mencionó que gravar más al gran capital es “una premisa del Banco Mundial, no es un planteo socialista”, y esa “es una discusión que hay que dar”.

En el mismo sentido, sostuvo que este Gobierno aumentó la deuda del país y subió los impuestos al consumo, y se mostró favorable a “analizar el IVA personalizado”.

En cuanto a la situación que encuentre en la administración si es elegido presidente, dijo que no es partidario de hacer auditorías especiales, dado que “los propios organismos las tienen. Con lo que ya existe tiene que funcionar. No se me ocurre ir a revisar todo”, destacó.

Sobre el final, dijo que “no importa”, con quién sea el balotaje y el debate previo, sea Álvaro Delgado o Andrés Ojeda. “En este país nos conocemos. Ojalá esto no se desmadre, pero un debate con el contrincante siempre es buena cosa”.

Finalmente, señaló que, si es elegido presidente, se inclina por continuar viviendo con su familia en Salinas, pero destacó que la residencia de Suárez y Reyes es un muy buen lugar para trabajar”.