Diálogo sobre la seguridad social finalizará el primer semestre de 2026, anunció Rodrigo Arim

Esta comisión operará en la órbita de la OPP “en cumplimiento del compromiso asumido”, señaló, y estará integrada por el Ministerio de Salud Pública, Ministerio de Desarrollo Social, Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, Banco de Previsión Social, Ministerio de Economía y Finanzas y la propia OPP.

Esta funcionará en plenario donde estarán representados otras entidades del Estado, además del movimiento sindical, las cámaras empresariales, el movimiento de jubilados y otros actores relacionados con la protección general de la infancia y los cuidados.

“El objetivo del Gobierno es instaurar un diálogo social comprensivo, que presupone discutir la matriz de protección social a lo largo de todo el ciclo de vida de las personas, desde el nacimiento o la concepción hasta la muerte”, señaló Arim.

Para ello, habrá que “rediscutir y redefinir desde una perspectiva integral cuál es el modelo de protección social que deseamos los uruguayos tener en este siglo XXI, manteniendo la sustentabilidad fiscal intertemporalmente y asegurando que las prestaciones que las prestaciones que brinda el sistema sean adecuadas para el desarrollo futuro de nuestros ciudadanos”.

Arim señaló que, en la primera sesión de la comisión, se incorporará la hoja de ruta para instalar el proceso de diálogo. A lo largo del año se instalarán los espacios de discusión, y se espera llegar al primer semestre de 2026 “con un diálogo culminado, con los acuerdos y discrepancias” y con un proyecto del Poder Ejecutivo que será remitido al Parlamento.

El titular de la OPP apuntó que “la sustentabilidad tiene que ver con muchos parámetros de funcionamiento del sistema y con el conjunto de prestaciones que la matriz de protección social le puede brindar a las personas a lo largo del ciclo de vida” y que “la edad de jubilación será un componente que estará dentro del espacio de discusión”, pero no es “ni excluyente ni exclusivo del diálogo social”.

Para el Gobierno, “tiene que haber cierto grado de flexibilización en los mecanismos de la jubilación, pero a la vez mantener el supuesto básico de que, en la medida que la esperanza de vida va aumentando, es importante generar los incentivos para que las personas sigan desarrollando su vida laboral”.